sábado, 18 de mayo de 2013

Darkness.

Me quedé sentada, mirando a la nada... viendo como ese pequeño frasco de esperanza derramaba sus últimas gotitas. Se había ido para siempre, su olor, su calor. Ya no sentía la felicidad, se desvaneció entre mis dedos en un instante, dejando un mal sabor de boca. Ese rayo de luz se apagaba, se llevaba con el las ilusiones. Grité, lloré, pataleé por ellas... Pero no recibí respuesta ni consuelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario